Mi propia telenovela.

Siento que vivo en una telenovela. Si, de esas mexicanas o brasileras con drama excesivo, situaciones exageradas y amores prohibidos. Aunque esta historia parece no culminar; pues termina y vuelve a empezar infinitas veces, solo que cada vez que da comienzo, hay nuevos personajes. Pero al parecer la trama no cambia. Las mismas situaciones, traumas y decepciones se repiten una y otra vez. La verdad, parece ser un remake barato de todo lo que pasó antes.

Me siento actor protagonista. Actuando para un público imaginario o invisible el cual me entiende y sufre conmigo... O que tal vez me critica, o también puede ser que yo sea el antagonista. Creo que ya ni tiene coherencia lo que digo.

Es desesperante saber que es la tercera vez que paso por algo así, solo que esta tercera apenas esta comenzando. Por eso trato en lo posible de no cometer los mismos errores de las veces anteriores; solo que veo como las cosas presentes no dejan de asemejarse sorprendentemente con las situaciones del frío pasado. Nunca olvidare aquella frase que dijo un sabio árabe “te gusta el caos, por eso te gusta repetir la misma historia una y otra vez, pero con personas diferentes” creo que me identifica por completo, así que esperare y confiare en que esta tercera vez haya un final feliz para este torturante y aparentemente interminable melodrama.