It's like you're pouring salt in my cuts.

Si le ciel a un enfer, le ciel peut bien m'attendre.

martes, 21 de febrero de 2017

La dama oscura.

Hace algunos años conocí a una muchacha, aunque, siento que la conozco de toda la vida, desde hace unos siete años es que he sentido más su presencia. Esta chica es incondicional SIEMPRE está ahí, a mi lado, adelante, o detrás de mi, pero allí está. Hay momentos en los que se aleja y me deja por un tiempo, pero cuando me descuido, puedo notar que ella sigue allí, firme, mirándome y con el mismo propósito aunque no esté expresamente presente. Como hay veces en las que se aleja relativamente, hay veces en las que no me deja solo por temporadas, me persigue a todos lados, y por alguna razón, ella tiene un control sobre mí que desearía no existiera. Está ahí cuando como, está ahí cuando me duermo y me levanto, incluso; cuando duermo, se que ella está rondando. 

Por ella dejé de creer en todas las religiones, en el destino, en Dios y en mí mismo. Es como si estuviese determinada a chupar toda mi energía y mis ganas de vivir. 

No sé como hacer, no la quiero en mi vida. Todo el tiempo me recuerda las cosas malas que ella misma me ha hecho pasar, pero por más que trate, no puedo alejarla de mí, o sacarla de mi cabeza. Lo más enfermizo, es que a veces creo que disfruto de su compañía por lo acostumbrado que estoy a que esté cerca...
Esta muchacha se llama depresión, y me gustaría muchísimo que me dejara en paz.

martes, 7 de febrero de 2017

Karachi.

Usualmente la gente piensa en Londres o París para hablar de amor, o desamor, en mi caso, ambas ciudades representan cosas distintas. Londres para mí fue libido no concretado, París fue libertad. De Europa la ciudad que me hizo sentir desamor fue Madrid, una madrugada llorando en un baño no fue la mejor forma de disfrutar la capital del antiguo Imperio Español. Pero, hay una ciudad que trae para a mi mente, libido, desamor, frustración, celos, impotencia y tal vez un poco de amor. Karachi, cada vez que leo en algún lado esta ciudad recuerdo uno de los momentos más intensos de mi vida. Lo peor del asunto es que nunca he ido, pero te conocí a ti, y tus orígenes son de esa ciudad de Pakistán. Representas tanto en mi vida: mi mayor deseo sexual, mis celos, mis tantas competencias sin ganar,  uno de mis dilemas internos y Jolene. Hasta hace unos 2 años eras mi Jolene principal, pero la única de las Jolenes que llegué a querer por alguna enfermiza razón. Pienso a ti a diario, uno de mis “Nombres artísticos” está basado en ti. No sé como alguien con el que solo hablé unos cinco minutos puede significar tanto, o como alguien en el que pienso casi a diario debería no significar nada. Eres la definición de platónico. Estas fechas me recuerdan a ti porque hace aproximadamente 4 años llegaste a mi vida, solo por unos minutos, como dije anteriormente, pero nunca te fuiste. Odio recordar, a pesar de todas las cortadas, recordar sigue siendo la manera más efectiva de auto-flagelación que tengo. Quisiera algún día poder volver hablar contigo y quitar tantas dudas de mi perturbado cerebro.  Espero estés bien, eres la única Jolene a la que no le deseo mal, literalmente, la única a la que no le he deseado la muerte en algún momento. Sí, así de dañado soy. Pero, al fin y al cabo,  supongo que eres la única de tantas que nunca tuvo intención de herirme.

Londres significa libido, París; libertad y Madrid, desamor. Pero Karachi significa todas mis frustraciones porque Karachi eres tú.